La importancia del gateo de los bebés en la guardería

El gateo es mucho más que un paso previo a caminar. Es una etapa fundamental en el desarrollo del bebé que estimula su cuerpo, su cerebro y su independencia. En el entorno de la guardería, este proceso se vuelve aún más enriquecedor gracias al espacio, la socialización y la guía de profesionales del cuidado infantil.

¿Por qué es tan importante gatear?

El gateo activa múltiples áreas del desarrollo del bebé al mismo tiempo:

🧠 Desarrollo cerebral

Gatear implica coordinar brazos y piernas de forma cruzada (mano derecha con rodilla izquierda y viceversa), lo que estimula ambos hemisferios cerebrales. Esta conexión mejora habilidades como la concentración, la memoria y la lectoescritura futura.

💪 Desarrollo físico

Fortalece músculos del cuello, espalda, brazos y piernas. Además, mejora la coordinación, el equilibrio y la postura, aspectos clave para caminar más adelante con seguridad.

👁️ Coordinación ojo-mano

El movimiento constante del gateo permite al bebé ajustar la distancia, enfocar objetos y mejorar su percepción visual, esenciales para tareas como leer y escribir.

💬 Estímulo de la comunicación

Al explorar el entorno, el bebé siente curiosidad, interactúa con objetos y personas, y comienza a emitir sonidos, lo que fomenta el lenguaje.

¿Cómo apoya la guardería el proceso de gateo?

Las guarderías, especialmente aquellas que comprenden la importancia del desarrollo motor, ofrecen un entorno ideal para que los bebés gateen de forma segura y estimulante:

  • Espacios amplios y adaptados para el movimiento libre.
  • Superficies seguras que invitan a explorar sin miedo.
  • Materiales sensoriales que despiertan la curiosidad (texturas, colores, sonidos).
  • Interacción con otros niños, lo que motiva la imitación y el juego compartido.
  • Profesionales atentos que acompañan sin forzar, respetando los ritmos individuales.

¿Y si mi bebé no gatea?

No todos los bebés gatean. Algunos se desplazan arrastrándose o pasan directamente a caminar. Aunque no es motivo de alarma inmediata, sí conviene observar si hay otras señales de desarrollo motor o coordinación que puedan necesitar seguimiento.

En la guardería, los cuidadores pueden alertar a las familias si notan alguna dificultad o retraso, y recomendar la consulta con un profesional (pediatra o fisioterapeuta infantil).


El gateo es una etapa maravillosa que prepara al bebé para muchos aprendizajes futuros. En la guardería, esta fase se vive con alegría, libertad y estímulo, aportando beneficios que van mucho más allá del simple movimiento.

Fomentar el gateo es fomentar la autonomía, la confianza y el desarrollo integral de cada niño.